MÉXICO, 1 ago (Xinhua) -- Las marcas chinas que comercializan vehículos ligeros en México tienen espacio para crecer más en el país aplicando objetivos de largo plazo y agregando servicios, ante la capacidad del mercado local de ampliar sus números de venta, de acuerdo con expertos.
El director regional para Latinoamérica de la firma Urban Science, Eric Ramírez, consideró que aquellas marcas chinas que opten por modalidades más allá de la venta podrán crecer su presencia en el país, una vez que ha quedado demostrado que a México le atrae en gran medida el producto generado en el país asiático.
"Que no nada más sea la venta, sino que sea la venta, la posventa, la presencia, la relación con los distribuidores", sugirió el experto, al margen de un evento organizado hoy por la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Los vehículos fabricados en China han ganado aceptación en el mercado mexicano con mayor notoriedad desde 2022, colocando actualmente al país asiático como el principal proveedor de unidades procedentes del extranjero, ya sea por la vía directa de la importación, mediante subsidiarias o a través de asociaciones entre marcas, dijo Ramírez.
En la actualidad, la participación de las marcas chinas en el mercado mexicano es alrededor del 8 por ciento, por lo que aún queda margen para que la cifra siga en aumento, pese a los retos del exterior como la nueva política comercial en Estados Unidos.
En su intervención, el presidente ejecutivo de la AMDA, Guillermo Rosales, aseguró que existe una capacidad en el mercado mexicano cercana al 25 por ciento de incrementar la venta de vehículos ligeros.
"Es decir, en lugar de un mercado de 1,5 millones, deberíamos estar en un mercado de dos millones de vehículos en función de la población, de la capacidad adquisitiva del mercado mexicano y de los indicadores de flota, tanto de antigüedad como del número de vehículos por familia y por persona", ilustró Rosales.
Para ello, el Gobierno mexicano debe enfocarse en el desarrollo de políticas públicas que permitan que la demanda local aumente, así como en el combate al contrabando de vehículos.
Por ahora, la perspectiva para la venta de vehículos es de estancamiento en 2025, alrededor de los 1,5 millones de unidades, a la espera de la revisión del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) de libre comercio, adelantó Rosales.
México es el séptimo mayor productor de vehículos a nivel global y el quinto exportador, de acuerdo con expertos.